Cerca de 1000 presos/as kurdos/as están en huelga de hambre con carácter “irreversible e indefinido” desde el 15 de Octubre en Turquía.
Actualidad Kurda/ N.I.- Nueve mujeres presas iniciaron una huelga de hambre el 12 de septiembre en Diyarbarquir, la principal ciudad kurda en Turquía, y después de 47 días su estado de salud es preocupante, los daños neuronales pueden ser ya irreversibles y es difícil que el organismo resista más de 60 días si la persona no ingiere nutrientes básicos como sal, azúcar y vitaminas. Según fuentes médicas, no es este el caso.
Progresivamente se han ido uniendo a sus reivindicaciones y forma de protesta cientos de presos/as kurdos/as desde distintas cárceles de Turquía, hasta sumar a fecha de hoy unas mil personas y quizá podrían seguir sumando. Los/las presos/as reivindican que se atiendan los derechos humanos del líder kurdo Abdullah Ocalan y que se le permita ser interlocutor de sus demandas. Ocalan es uno de los fundadores del PKK y cumple cadena perpetua en la isla de Imrali, fue encarcelado en 1999 y desde hace 14 meses está sometido a aislamiento absoluto y falta de atención médica a pesar de tener problemas de salud. En segundo lugar, los presos exigen el reconocimiento del kurdo como idioma y que sea impartido en la educación y utilizado en la esfera pública. En tercer lugar, y en conjunción con la segunda demanda, reivindican poder defenderse en su lengua materna en los tribunales.
¿Qué formas de lucha les quedan a aquellas personas despojadas de todo derecho? Miles de kurdos/as llenan las cárceles turcas y sólo desde 2009 han sido ya encarcelados 7000, entre políticos, abogados, periodistas, académicos y activistas porque el gobierno de Erdogan usa la ley antiterrorista para acallar cualquier voz a favor de sus derechos.
Y continuan construyendo cárceles.
En 2007 se dieron elecciones generales en Turquía y el DTP (Partido de la Sociedad Democrática) , partido prokurdo, ganó por mayoría en las provincias kurdas.
El pueblo kurdo lo conforman unos 40 millones de personas y aproximadamente la mitad residen en Turquía, siendo aproximadamente el 30% de la población turca.
Poco tiempo después el gobierno Turco acusó al DTP de estar vinculado con los movimientos separatistas kurdos y el PKK, organización armada reconocida como terrorista, y en 2009 fue declarado ilegal, la mayoría de sus electos y los cargos que representaban al pueblo kurdo en esos momentos fueron acusados de terroristas, encarcelados o puestos en prisión preventiva, estado en el que permanecen aún miles de ellos/as.
El PKK, es el partido de los trabajadores del Kurdistán y surgió en 1984 para enfrentarse al gobierno turco y defender sus derechos en un conflicto armado. En la actualidad el PKK, está declarado como grupo terrorista por Turquía, la Unión Europea y EEUU. El PKK continua la guerrilla armada y sigue siendo, junto a su líder, Abdullah Ocalan , la única esperanza para una gran mayoría de kurdos/as. La vía política, parlamentaria, para la defensa de sus derechos ha sido ampliamente cercenada como lo demuestran los miles de representantes, intelectuales y voces kurdas que llenan las cárceles turcas.
El Kurdistán es un amplio territorio muy rico en petróleo y, hace algunas décadas, se lo repartieron entre Turquía, Irán, Iraq y Siria, con la complicidad internacional. Desde entonces el pueblo kurdo luchó primero por su independencia, después bajó sus demandas a la autonomía y ahora, reivindican sus derechos culturales y humanos, hablar su lengua materna. El pueblo kurdo sufre genocidio, represión, persecución, tortura, exclusión,… bajo la
mirada distante y cómplice de la comunidad internacional. Algunas organizaciones como Amnistía Internacional, Human Rights Watch (HRW) … personalidades como Noam Chomsky, y partidos políticos de Izquierda de distintos países, denuncian la situación de la nación kurda y apoyan y luchan por sus reivindicaciones, pero no es suficiente para eliminar, paliar una pequeña parte de la injusticia y sufrimiento que recibe este pueblo.
Hoy, en Turquía son cerca de 1000 presos/as kurdos/as los que llevarán hasta sus últimas consecuencias una huelga de hambre. La cifra me sobrecoge y me aterra el carácter irreversible e indefinido de su protesta. Sus reivindicaciones son justas, básicas, necesarias, pero no confío en Erdogán, hasta ahora no ha hecho sino acallar, reprimir y faltar de “una y mil maneras” los DDHH del pueblo kurdo. De otra parte la comunidad internacional no reacciona y la presión que podría ejercer la Unión Europea, si se diera, por la vinculación de ambas en tanto Turquía se haya en proceso de anexión a la misma, parecería insuficiente: Son nulos los avances de Turquía en esta materia en los últimos años y es que actualmente Turquía no parece interesada en pertenecer a la UE.
Nieves Iparraguirre
Es muy interesante el artículo por que a través de la problematica en las cárceles Turcas, donde se violan los derechos humanos todos los días de los y las Kurdas, se hace una retrospección historica pertinente, para quienes muy poco conocemos sobre la desmenbración de su territorio, por otro lado es menester decir que debieran escribirse más notas sobre la coyuntura política y la perspectiva de las diversos partidos políticos.