La Comunidad Yezida digna representante de la kurdidad enfrenta con nobleza al fanatismo genocida
Sucedió en la segunda semana de agosto del año 2009 que dos integrantes de un comando suicida presuntamente ligado a una organización afín a Al Qaida, perpetró un atentado en la confitería más concurrida de Sinyar y el saldo fue de 18 muertos . ¿Pretendían con este crimen celebrar la destrucción de dos aldeas de la región como , Qahtaniya y Jazeera donde murieron 350 personas y cerca de 1000 familias perdieron sus hogares?
Las víctimas pertenecen a la comunidad religiosa yezida, la religión originaria del Kurdistán y por estar en una provincia, la de Niniveh , fronteriza con Siria y Turquía , que fue sometida a una intensa campaña de arabización durante la dictadura de Saddam Hussein, no está dentro de la esfera del Gobierno de la Región Autónoma del Kurdistán y resulta entonces presa fácil para estos grupos fanatizados.
Todo comenzó en el período que va entre los años 636=641 de la Era Común cuando los árabes con la excusa de propagar el Islam, pues actuaban contra el mismo espíritu tolerante que le había querido insuflar el profeta Muhammad, iniciaron la conquista de la Mesopotamia; tuvieron lugar masacres y asesinatos en masa contra quienes se oponían a los invasores que buscaban imponer su idioma y sus creencias.
Un grupo relativamente numeroso logró refugiarse en los lugares más inaccesibles de la región en los macizos de Sindyar y en las montañas de Lalish y Qendil y allí había comunidades cristianas con las que compartían el mismo origen étnico y se mezclaron, por ello, no son extrañas las relaciones de amistad entre cristianos y yezidas (o como se llamara la religión en ese tiempo).
Los kurdos que no pudieron huir concluyeron adoptando la religión de sus invasores, pero a pesar de ello dándole un carácter distintivo, y tomaron el alfabeto cúfico para su lengua. El alfabeto yezida quizá el kurdo primitivo está muy relacionado con urdú.
Al presente los kurdos han estructurado una fonética que unifica a sus diferentes dialectos cuyas escrituras difieren (kurmayi , kirmandyi, dimili es latina y la sorani que es cúfica).
Hacia el siglo XII el Sheij Adi bin Musafir proveniente del valle de la Bekaa en el Líbano y miembro de la tariqá (senda) sufí de la Adawwiya y con influencia de los maestros sufíes Al Gilana y Mansur al Halash se retiró a las montañas de Lalish , donde reconstruyó las ruinas de un monasterio abandonado, fue una persona de grandes cualidades, se dice que tenía el don de hacer llover a voluntad, una gran austeridad el mismo se tejía su ropa de lino y mucho ascetismo. Tal como escribió Pîr Dr. Mamo Farhan Othman “En los hechos, con él se organizó un sistema de creencias, símbolos y prácticas de los antiguos rituales que incorporaron las enseñanzas sufíes del Sheij Adi bin Musafir quien desarrolló una tradición religiosa única. Las reformas radicales que fueron implementadas por el Sheij Adi (1074-1162) y luego el hijo de su sobrino Sheij Hasan Bin Uday Bin Abu Al Barakat (1184-12467) inauguraron una nueva era en el Yezidismo”(1)
Los Yezidas creen un solo Dios (Xwedê” en kurdo pr. Juedé) lo que quiere decir “quien se creo a sí mismo y por sí mismo y a la vez es el creador del universo” como el primus motor movile de Aristóteles sólo se ocupa de los asuntos celestiales mientras sus Siete Ángeles (Heftan) tienen cada uno responsabilidad sobre los planetas el Ángel Pavo Real (Malik Taus o Tawsi Melek) es el encargado de la tierra.
Pero como ha escrito el Pîr Dr. Mamou F. Othman “Tras el Sheij Adi un espeso velo cayó sobre el Yezidismo”.(2)
Es decir que es una religión antigua que adoptó elementos del sufismo , lo mismo que se pueden rastrear elementos babilónicos, paulicianos, ofitas y sobre todo mitraístas (la misma figura del Malik Taus, el Pavo Real no es ajeno a los mil ojos de Mitra), tampoco faltan elementos hebreos ni zoroastrianos – sobre todo del zervanismo- ; pero no es un sincretismo y en caso de suponerlo así no habría religión que no lo fuera baste pensar en la fecha elegida para celebrar la Navidad, se eligió la fiesta mitraísta del “Sol Invicto”, ni tampoco es un cisma islámico posición sostenida por el eminente orientalista Roger Lescot. No tienen libros canónicos si no deuterocanónicos el Jilwa (Revelación) y el Mishaf Resh (Libro Negro) y recopilaciones de pequeños salmos ( qawals ) todas escritas en kurdo.
A partir del siglo XII, no permiten más las conversiones, y, practican la endogamia y ésta dentro de la casta. Hay básicamente dos la de los clérigos (Sheijs, Pîrs, Qawals) y de los laicos (Murids) pero no tienen más que un significado ritual y honorífico, no son como las de la India un instrumento de opresión y discriminación. Si bien su cabeza religiosa el Baba Sheij se elige entre la casta de los sheijs, los jefes políticos son laicos .
Señala Ethem Xengim “durante el período de los conflictos internos entre los musulmanes ellos optaron por Marwan (de la dinastía Umayia –Omeya- ) porque su madre era kurda contra los Abbasíes, al estar en el bando perdedor sus vecinos se transformaron en enemigos” .
Así en 1254 el emir de Mosul Badr-ed-din Lulu lanzó una expedición punitiva contra los yezidas y tras una feroz batalla los yezidas debieron abandonar el campo cien prisioneros fueron crucificados, otro tanto fueron ahorcados y el templo de Lalish fue allanado y la tumba del Sheij Adi profanada quemando a sus restos.
Al punto tal que el ingeniero agrimensor holandés Carsten Niebuhr entre 1761/67 de la E.C. visitó a la comunidad yezida en numerosas oportunidades. En su libro de viajes Niebuhr recordó como la mayoría musulmana oprimía a los yezidas. Por ejemplo, observó que “el odio que los islámicos sienten por los yezidas es tanto que uno de sus teólogos confirmó que asesinar a un/a yezida no era un crimen” . Concepto que lamentablemente no ha perdido vigencia entre los fanáticos, tal como se puede apreciar hasta el día de hoy.
Baste citar a J.Layard en su libro “Los descubrimientos en Nínive” escrito en l844, que a la asamblea anual de otoño donde se sacrifica un toro que se realiza en Lalish, no había ningún grupo de yezidas que trajera horrendos memoriales de agravios.
Tanto en el Imperio Otomano como en Irán sobre todo tras la caída de los Qajar sufrieron tiempos muy duros, que se agudizaron tras la auto llamada “revolución Islámica” por la doble discriminación (étnica y religiosa). Recordemos simplemente las palabras del Ayatollah R. Jomeiní “Los kurdos son hijos de Satanás” que demonizó a todo el pueblo de Kurdistán cualquiera fuese su religión.
En Irak los yezidas gozaron de una relativa tranquilidad hasta la llegada al poder de Saddam Hussein, que negó su identidad llamándolos “árabes omeyas” y además de las masacres cometidas contra el pueblo kurdo en general a los yezidas los reagrupó en aldeas donde no podían ni comprar automóviles, ni disponer de sus bienes dependían en todo de la voluntad del dictador hasta para actos nimios como beber y comer.
La conformación de la Región Autónoma del Kurdistán lograda gracias a la insurrección del pueblo kurdo, dejó amplias zonas pobladas por yezidas fuera de su jurisdicción, de allí los atentados en las montañas de Sindyar cercanas a Siria pues casi no pueden protegerse, por eso su pedido de incorporarse a la Región Autónoma del Kurdistán y contar con el apoyo de ejército kurdo (peshmerga) .
Como bien ha dicho Pîr Dr. Mamou Farhan Othman en Oxford “La Religión Yezida es un microcosmo de la cultura kurda”. Por esas dos razones por kurdos y por yezidas son perseguidos mortalmente, en Siria son prácticamente parias, en Turquía de 50.000 que había en los años 70 sólo quedan 5000, en Irak salvo en la zona Autónoma corren riesgos muy serios y en Irán junto al resto del pueblo kurdo sufren la más cruel opresión.
Alguien observará que una muchacha yezida Dawa Jalil que por amor a un musulmán abandonó a la Comunidad y abrazó la fe islámica, pero atraída con falsas promesas de perdón fue asesinada por su propia familia, lo que sirvió para que personas ora por ignorancia ora por tener prejuicios antiyezidas, considerara a este crimen como algo habitual entre ellos. Muy por el contrario, toda la comunidad excepto los familiares que habían participado del hecho (a los cuales la justicia kurda puso en prisión) repudió el asesinato desde el Baba Sheij hasta el menor de los murides. Sin embargo, fanáticos musulmanes detuvieron un ómnibus que llevaba trabajadores textiles a Bashiqa y preguntaron ¿Quiénes eran yezidas? Fueron 23 inocentes operarios acribillados a balazos, por terroristas que no tenían nada que ver con la familia del prometido de Dawa Jalil.
Por supuesto no es esa la actitud para con funcionarios turcos que secuestran muchachas yezidas y las usan como objetos sexuales, o, cuando en Irán sufren cárcel y humillaciones e incluso la muerte por el simple hecho de ser kurdos y yezidas.
Así como entre bueyes no hay cornadas, los colonialistas que tras el tratado de Lausana se repartieron Kurdistán se unen para atacar a un pueblo (el kurdo) y sobre todo a una minoría religiosa que representa la esencia de la kurdidad y que los enfrenta con su serena dignidad, algo que ellos jamás podrán tener.
Ricardo Gustavo Espeja
Notas :
1) Pîr Dr. Mamo Othman “Yezidis befote Sheik Adi”
2) Pîr Dr. Mamo Othman “The Yezidis as microcosm of Kurdish Culture” Similaritieas and differences (conferencia pronunciada en Oxford).
Excelente trabajo, Ricardo. El pueblo yezidi ha sufrido muchas estigmatizaciones tanto en el cercano oriente como también en el occidente.