En el pasado 21 de noviembre a las 21.00 empecé una huelga de hambre como un gesto solidario con los presos políticos kurdos detenidos en condiciones infrahumanas en la Cárcel Central de Adra (Damascos), los 170 presos políticos kurdos llevan desde el 30 del pasado mes de octubre en huelga de hambre, su intención es continuar la huelga de hambre hasta que:
– Obtengan garantías de que tendrán un juicio justo.
– Se les garantice que termina su aislamiento para salir al patio de la prisión y, además, se les permita visitas familiares.
Hasta hoy día el régimen sirio no se movió ni un pelo, al contrario del gobierno español que intenta con, todas las posibilidades, poner fin a la huelga de hambre de la activista Sahraui Aminatu Haidar, el gobierno sirio pasa totalmente de las exigencias de los presos kurdos. El régimen sirio con esta actitud quiere decir, simplemente, “No queréis comer, pues mejor, 170 kurdos menos nos va bien”.
Hace tres días HRW publicó
un informe que explica detalladamente la situación perrísima de la población kurda en Siria al contrario de las avances en Irak y Turquía.Verdaderamente, no me veo capaz a explicar el porqué de esta terrible conducta del régimen sirio contra los kurdos. Siria estrecha sus relaciones con Turquía a todos los niveles (económico, político, educativo, social…), yo pensaba que Siria copiará, poco a poco, los pasos que da el gobierno de Erdogan para solucionar el conflicto kurdo-turco. No quiero extenderme en la comparación entre las conductas de los dos gobiernos hacia los kurdos, solo os doy este ejemplo. Turquía lleva 11 meses emitiendo un canal kurdo (TRT6), 24 horas al día, mientras el gobierno sirio hasta hoy día no emitió ni un segundo televisivo en kurdo. Me duele mucho que mis sobrinos van perdiendo su idioma materno, me duele mucho que no tengan una hora televisiva de dibujos animado en kurdo.
El primer día de la huelgas de hambre es el día más duro, ya luego el estómago deja de hacer ruido y se va acostumbrando a no ingerir los alimentos. Yo ya tenía una experiencia de dos días, fue una huelga de hambre para protestar la detención del líder kurdo Abdullah Ocalan en el año 1999 a consecuencia de un complot internacional, y sigue hasta este momento encarcelado en una isla turca. Pero esta vez fueron dos días más y sin compaña, fuero dos días en Ciudad Real y otros tantos en Madrid.
En el tercer día de mi ayuno solidario y en la víspera de mi acción frente la embajada Siria, solo, tuve un dolor fuerte en mi cabeza, que me dejó despierto hasta las cuatro y pico.
A las 8.55 coloqué las dos pancartas una en el pecho y la otra a mi espalda, y puse la cadena con unos cuantos bolígrafos alrededor de mi cuello. Y me puse en el Paseo de prado frente a la embajada de la republica árabe de Siria.
El Paseo del Prado parecía un maratón, todo el mundo corriendo, el termómetro, de la parada del autobús, marcaba 9º grados. La gente llevaba las manos en los bolsillos o metidos en guantes y yo, sin parar y con sonrisa permanente: “Una firma por favor”.
Al ser friolero y por no haber unos rayos solares en las primeras horas de la mañana, andaba en un espacio de diez metros entre idas y vueltas, tanto para calentarme como para enseñar las dos pancartas a los transeúntes, solo paraba a la hora de recoger una firma.
Estaba en mi cuarto día del ayuno solidario, no llevaba una botella de agua temiendo llenar la vejiga para ir al baño. Seis horas sin moverme del entorno de la plaza Platerías Martínez.
A las dos horas de mi presencia ante la embajada avistaba los funcionarios y los agentes de la embajada en el portal del edifico y detrás del cristal de la ventana hablando entre sí y mirando hacia mi.
Al final deciden mandar tres agentes que velan por “la seguridad de la embajada”, se acercan de mi (dos de ellos sujetan sus cámaras –móviles, yo subconscientemente doy la espalda a ellos, me rodean como se fuera una presa, y después de unos segundos dando la espalda a sus cámaras y mirando hacia el Prado decido dar la cara, se alegran, sin sonreír, y empiezan a sacarme fotos y más fotos. Desde arriba el embajador y otra persona a su lado observan la escena, es la primera vez que siento tanto asco por sacarme fotos de esta manera y no os oculto, mi corazón golpeaba con toda su fuerza.
Antes de que vinieran los agentes, un español echó su firma y me dijo: “Tienes huevos para estar aquí ehh, ¡Ten cuidado!, yo, sonriendo a él y a la vez deciendo en mis entrañas, qué podrán hacer conmigo?
España me proteja. Pero después de sacarme fotos en esta manera tan vulgar, ya vuelvo a tener miedo.No solo eso, me mandaron una chica para saber quien soy, la chica se acerca de mí y muestra mucho interés para saber de qué va mi campaña y quién soy…, vamos fue un interrogatorio pero por primera vez femenino. La pedí que me firme, pero dijo:
“No quiero meterme en estas cosas”.Le dije:
Tú vienes de la embajada, ¿no?Ella: No, soy vecina, vivo en el mismo edifico.
Al final de nuestra conversación, me pedió una copia de la carta que va dirigida al presidente de gobierno José Luis Rodríguez Zapatero, y también mi nombre.
Yo le dije busca Zinar en Google puedes conseguir lo que quieras sobre mi.
Se va por el paseo del Prado, sin abrigo ni bolso, da la vuelta a la manzana por la calle Almudena y vuelve a entrar de donde salió, al rato baja a pagar tasas en La Gaixa, termina sube y de nuevo baja al banco.
¿A ver qué quiere esta gente de mi?
¿Qué me pueden hacer?
Un kurdo curtido me dijo: Hoy mandarán un montón de faxes y correos a Siria.
Me pregunto: ¿Para qué? ¿Qué harán con mis fotos?, francamente ni idea.
Volvemos a las firmas, en seis horas pude conseguir casi 50 firmas, algunas firmas me costaban unos 20 minutos de debate y conversación. Mucha gente pasaba y leía la pancarta que estaba a mi espalda y decía: ¡Siria!, algunos leían la carta y no firmaban, me decían: Tengo que informarme más, no sé mucho del caso. Otros se acercaban con el bolígrafo en la mano y echaban su firma ya sabían algo sobre los crímenes el régimen sirio.
Había firmas de: Maruecos, Ecuador, Chile, España, Guinea Ecuatorial y del Tíbet.
Un opositor de la dictadora en Guinea Ecuatorial se acercó a mí y me dijo:
“Yo también estoy machacado cono tú”.Y el monje tibetano me dijo en inglés: We have to fight (Tenemos que luchar).
Una vecina de la embajada me dijo su firma y me dijo:
«Que me van a regañar los de la embajada».Y muchos otr@s más me apoyaron con sus palabras y así pasaron unas seis horas enrequicedoras que me aportaron una experincia inolvidable.
Zinar Ala – Ciudad Real
Ole tus huevos, Zinar!Biji Kurdistan!Zuru
Ole tus huevos, Zinar!Biji Kurdistan!Zuru
TIENES QUE TENER CUIDADO, HAS PENSADO EN TU FAMILIA?
EL PUEBLO KURDO ES UN PUEBLO ÁRIO ES UN PUEBLO HERMANO DE EUROPA Y MERECE SER CONSERVADO EN TODO Y PARA SIEMPRE ,ÁNIMOS ZINAR.
Spas Diana y gracias por tu visita.
la gente tiene que comprometerse mas por favor!…..50 firmas en 6 horas…deben ser mas ayuden al pueblo kurdo….!!!!