Apoyando el pueblo Palestino

Ayer estuve con mis paisanos árabes y manchegos en una manifestación contra el nuevo genocidio israelí en Gaza. No pude contener mi ira, cogí los altavoces y canté en castellano y luego en árabe también los manchegos cantaron conmigo: «Salam» (La Paz) para Palestina. En la manifestación me preguntaban si era Palestino, no es la primera vez que me asocian con una nación.

Hoy leo una crónica del curtido periodista Diego Farto, que me considera musulmán y me concede otra ala, si ya se lo dije a otro periodista Carlos Otto, que puso un tilde en mi apellido así Alá, que no tengo ningún contacto, ni físico ni espíritual, ni con dios ni con ninguna religión. Nada, cosas que pasan en la prensa escrita y digital.

Corto y pego una parte de la crónica de La Tribuna:

Musulmanes de Ciudad Real apoyan al pueblo palestino

Dos ciudadanos de países limítrofes con el Estado hebreo afirman que las represalias militares contra la población civil aumentan el apoyo electoral de los fundamentalistas

La preocupación es aún mayor entre las personas que proceden de un entorno cercano a estos hechos, como es el caso de Zinar Alas, un joven kurdo-sirio y Zouhair Salah Halaoui, ciudadano libanés, que residen en Ciudad Real desde hace varios años.

Por su parte, el joven Zinar Alas, recuerda que tradicionalmente el pueblo kurdo se sintió identificado con los palestinos por compartir su condición de nación sin estado y sufrir la represión y el exilio. Sin embargo, esté vínculo quedó roto por el apoyo de la ANP al dictador iraquí, Sadam Hussein cuando ya se habían hecho públicas las matanzas en poblaciones habitadas por la minoría kurda-iraquí.
Por estos motivos, la actual situación en Gaza provoca sentimientos de solidaridad, aunque menos intensos que en otras sociedades de la zona de Oriente Próximo.
De todos modos, Alas cuestiona también la solidaridad de los gobiernos de los países árabes con la población palestina y recuerda algunos hechos de estos días: «En Jordania, la policía impidió las manifestaciones de solidaridad con Gaza porque mantiene relaciones económicas con Israel», apuntó.

Al mismo tiempo, en coincidencia con Halaoui, recuerda que la agresiva política exterior israelí y el estado de guerra casi permanente con sus vecinos ha servido de excusa a muchos gobiernos árabes para negar a sus propios ciudadanos el avance en democracia y Derechos Humanos.